Cómo fomentar la lectura en los niños

La importancia de fomentar la lectura en los niños desde una edad temprana es innegable. Aunque a los adultos nos puedan abrumar en ocasiones las obligaciones diarias, preocuparnos de que los pequeños dediquen tiempo a la lectura es de vital importancia para su desarrollo integral. Además es tiempo de calidad que les dedicamos y que quedará en sus recuerdos, leer un libro antes de dormir puede convertirse en un hábito que ellos mismos busquen cuando sean más mayores.

En este post vamos a abordar los beneficios que supone la lectura para los más pequeños y cómo podemos convertirla en un hábito diario y divertido que forme parte de su rutina.


Beneficios de la lectura en los niños

Los beneficios de la lectura en los niños va mucho más allá de adquirir conocimientos generales, puesto que proporciona una serie de beneficios fundamentales para su desarrollo cognitivo y emocional.

  • Estimulación cognitiva: al sumergirse en las historias de los libros, se activan áreas cerebrales relacionadas con la comprensión, la memoria y la resolución de problemas.
  • Fomento de la creatividad: explorar tramas, personajes y mundos imaginarios proporciona un terreno muy fértil para dar rienda suelta a la creatividad. Los niños aprenden a visualizar escenarios, a dar vida a personajes y a construir sus propias interpretaciones de las narrativas, estimulando así su capacidad creativa de forma individualizada.
  • Desarrollo del vocabulario: la lectura regular es una fuente inagotable de nuevas palabras y expresiones. Este enriquecimiento lingüístico no solo mejora la capacidad de los niños para expresarse verbalmente, sino que también influye positivamente en su habilidad para comprender y asimilar información.
  • Fortalecimiento del vínculo afectivo: la interacción entre padres e hijos durante la lectura, ya sea a través de la narración compartida o simplemente leyendo juntos, crea un vínculo emocional único.
  • Estímulo de la empatía y la conexión emocional: a través de la exposición a diferentes situaciones emocionales en las historias, los niños desarrollan una comprensión más profunda de las experiencias humanas. Así que la empatía se fomenta al identificarse con los personajes y sus emociones, promoviendo así una comprensión emocional más rica y matizada.
  • Desarrollo de habilidades sociales: al intercambiar impresiones sobre los personajes, los pormenores de la trama y los dilemas presentados en los libros, los niños desarrollan habilidades sociales como la comunicación efectiva, el intercambio de ideas y el pensamiento crítico.


Consejos para fomentar la lectura en casa

Saber como motivar a un niño a leer tiene que ver con el hecho crear de una ambiente propicio para que los pequeños descubran la magia de las palabras y se sumerjan en un mágico universo de historias que aguarda entre las páginas de los libros.

Dedicar el tiempo suficiente para crear el hábito

Dedicar diariamente al menos 30 minutos a leer con los niños no solo nutre el hábito de la lectura, sino que, además, crea recuerdos compartidos que perduran con el paso del tiempo.

Conocer sus gustos y preferencias

Al igual que cada niño tiene sus preferencias respecto a los juegos y aficiones, descubrir sus gustos literarios permite elegir lecturas que despierten su interés en gran medida. Y es que personalizar la experiencia de la lectura es la clave afianzar el placer de leer.

Pedir consejos adecuados a docentes y especialistas

La orientación de profesores, bibliotecarios y libreros puede abrir las puertas a un gran abanico der opciones de lecturas adaptadas a la edad y los gustos específicos de los niños. No en vano, se trata de los especialistas mejor preparados a la hora de proporcionar las pautas para la lectura en educación infantil, más allá de de las típicas frases de animación a la lectura.

Proponer y dejar elegir

Invitar a los menores a participar activamente en la elección de los libros, proponiendo diferentes y atractivas opciones, les dota de un sentido de autonomía y relevancia en cuanto a su experiencia lectora.

Asociar la lectura con el juego y la diversión

La lectura se transforma en una aventura emocionante al introducir elementos lúdicos. Por ejemplo, leer historias de sus peluches o de sus dibujos animados favoritos convierte a la lectura en un juego, lo que garantiza momentos tanto de diversión como de aprendizaje.

Establecer rutinas y crear espacios de lectura agradables

Designar un rincón especial para la lectura en casa y establecer rutinas diarias, como leer antes de dormir, contribuye a integrar la lectura como una parte importante de la vida cotidiana.

Estimular sin presionar

La estimulación del interés por la lectura debe ser un proceso completamente exento de presiones. En este sentido, reconocer que algunos días pueden ser menos propicios para la lectura permite que los pequeño asocien el hábito con experiencias positivas y placenteras; en ningún caso forzadas.

Hablar acerca de los libros en la vida diaria

Integrar charlas y conversaciones sobre libros en situaciones cotidianas refuerza la idea de que la lectura es una parte natural y significativa de la vida diaria, lo que permite, a su vez, que conecten los personajes y las historias con su entorno.

Visitar librerías y bibliotecas

Mostrar a los niños que el mundo está repleto de libros, llevándolos a bibliotecas y librerías, fomenta la curiosidad y estimula la exploración. De ese modo, estos espacios se convierten en portales hacia nuevas aventuras literarias.


Sin duda, la lectura es un vehículo crucial para el crecimiento cognitivo y emocional de los niños. No hay herramientas más poderosas que los libros a la hora de enfrentarse a los desafíos de la vida con imaginación, comprensión y empatía.

En Istarduk contamos con una gran catálogo donde podrás seleccionar el libro adecuado para la edad del pequeño y disfrutar de ese tiempo de lectura con él.


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